No se resquebrajan por que no son de los mismos…

La carta de Mario Vázquez a Corral… Uach ni los tiempos ni las formas correctas… Castigado César Duarte sin derecho a visitas… El Peje quiere quitar la estatura de la Libertad…

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La carta de Mario Vázquez a Corral…
Uach ni los tiempos ni las formas correctas…
Castigado César Duarte sin derecho a visitas…
El Peje quiere quitar la estatura de la Libertad…

Por motivos de salud no tecleamos la entrega de este lunes -la que tradicionalmente “subimos” los domingos por la noche-, pero gracias a Dios, la cepa de Covid que entró a la casa, se está portando un tanto benigna, o menos virulenta, como usted lo entienda mejor, el caso es que por orden médica debemos de guardar cuarentena toda esta semana, para no andar esparciendo el virus ese a otras casas.

Así que para ponernos al día, hacemos esta entrega, con un par de temas que se quedaron en el tintero y que creemos todavía es oportuno comentar y otros que son del día. Así que con su permiso…

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La carta publicada por Mario Vázquez en sus redes sociales, dirigida a Javier Corral, no tiene desperdicio y este lunes todavía era comentada por algunos y es que Mario le puso todos los puntos a las “is” en lo que se refiere a la verdad del quinquenio de Javier Corral.

De mal logrado gobierno de Corral, bastaría con decir que su causa principal no la logró, Duarte no fue traído a la prisión en su gobierno, ni un solo duartista de primer nivel piso la cárcel y por el contrario, los pocos que la pisaron y otros que se escaparon de ella hablan de la entrega de “kilos y más kilos” a los enviados de Palacio a cambio de la libertad.

Es decir, la cacería anticorrupción, fue un nido de ratas corruptas que cobraron para dejar a los acusados libres. A la mejor pensaron que estaban cumpliendo el viejo dicho aquel de “ladrón que roba a ladrón” y de ese tamaño fue la falta de vergüenza.

En materia de inseguridad, de obras, de acciones reales, de recuperar la situación de todo el sector salud, en nada de eso Corral dio resultados, discursos muchos, mucha saliva gastada, muchos viajes en avión y helicóptero, pero nada de resultados.

Incluso habría que señalar que Corral fue un inútil hasta para reventar las aspiraciones electorales de la hoy gobernadora María Eugenia Campos, sin pruebas reales, con “recibos” inventados y falsamente certificados.

En ese tema, como en todos los demás, Corral se portó como el gran mentiroso que es, como el gran embaucador, como el fraude que es. Se inventó todo y no era “por una causa justa”, pues incluso a María Eugenia le ofrecieron la diputación federal, se la ponían en charola de plata, lo que quisiera, menos ser candidata a gobernadora, dejando en claro con ese ofrecimiento que no había una persecución a la corrupción, era una mentira con meros afanes electorales.

Es cierto, la carta de Mario Vázquez cimbró a muchos, comentarios hay de todo tipo, pero al final persiste solo un comentario, que se hace a forma de pregunta, ¿y en el PAN qué esperan para correr a Corral?

Hace tiempo -digamos poco más de un año- decíamos en este espacio que a Corral en ese entonces no tenían que correrlo del PAN, y eso lo decíamos en ese entonces, porque un ejercicio de esa naturaleza podría afectar de forma grave al mismo proceso electoral, de tal forma que era necesario que el PAN primero resolviera la elección y ya después viera el tema.

Hoy la situación a cambiado de forma drástica, Corral está trabajando para destruir a ese partido o bueno, digamos que le basta con hacerlos perder elecciones y se vende al mejor postor, ya sea con Claudia Sheinbaum, con Marcelo Ebrard o quien sea, así que la carta de Mario Vázquez es muy clara, pero deja el sabor de boca de que falta la acción, esa es la verdad, es la enumeración de hechos que pudieran dar pie a una causa, pero si solo queda en eso, los panistas de nueva cuenta estarán desaprovechando la oportunidad de desacérese de uno que solo es un lastre y no les da nada, más que dolores de cabeza…

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El Congreso del Estado dio a conocer que la Comisión de Gobernación inicia los trabajos para la reforma integral a la ley orgánica de la Uach, una reforma que hoy se puede decir llega fuera de tiempo y que están corriendo el riesgo de hacerla sin cuidar las formas debidas.

De entrada es increíble que no le den “el golpe” a lo que significaría que la Universidad se incendie, que en Palacio sean tan obtusos de no hacer su trabajo y que todos partan de la idea de que acelerar el paso, para ver si logran que el periodo vacacional les sirva de parapeto.

Al parecer no entienden que los grupos que hay en Derecho, Ciencias Políticas, Medicina, Ingeniería y otras dos que tres “facultades”, están velando armas y que solo es cuestión de que quien les paga abra la cartera, para que las cosas se pongan color de hormiga.

El viejo dicho de los políticos de la vieja escuela, señalaba que en política lo que cuentan son “los tiempos y las formas”.

Hoy se puede decir que los tiempos y las formas las echaron a perder cuando derrocaron a Luis Fierro y no se decidieron a dar “el paso completo”, metieron al maestro Villalobos Jión y se pusieron a jugar con el tiempo, estuvieron en el estira y afloja y hoy la situación es harto difícil.

En cuestión de tiempos, la situación es muy clara, el cambio de la Uach era “antes de Duarte”, pues la situación cambia y mucho “con Duarte aquí” y ese punto no requiere de mayores explicaciones.

En cuestión de formas, siguen tercos a sacar adelante una reforma a la ley orgánica de la Uach, sin un debido proceso universitario y es ese el punto que le abre la puerta a las impugnaciones.

También en cuestión de formas, es increíble que Palacio en sus diálogos privados con todos los aspirantes no les den camino de salida y que por el contrario, que a todos les sigan diciendo que tienen posibilidades y que todavía no hay una decisión.

Claro que es desgastante ejercer el poder, pero resulta mucho más desgastante para un gobernante “dejar hacer, dejar pasar”, pues esa ruta es la que más heridos deja en el camino, además de que dejan un amargo sabor de boca por la falta absoluta de decisión.

Si la Uach se incendia, hay claros culpables, de eso no hay dudas…

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Con la novedad de que el ex gobernador César Horacio Duarte Jáquez está castigado, cero visitas, solo su abogado y nadie más, ni en “la burbuja”, ni “en ventanilla”, mucho menos en el modulo.

Dicen los que vinieron con el chisme, que la orden les llegó desde Palacio, “cero privilegios”, abogados y medico y nada más.

El motivo fue la carta aquella que levantó mucho ruido y enojos, pues aseguran que el prisionero no cumplió con las formas y no pidió permiso a quién se debe de pedir permiso para enviarla.

Al consultar cómo recibió el castigo, la respuesta nos deja asombrados, “sí se pidió permiso, es más se consensuó y se determinaron los temas y demás cosillas de la dichosa carta”.

Al escarbarle al asunto, alguien nos recordó al gran amigo al profe Mario Tarango, con una frase que le escuchamos a él, a la mejor no faltará el que nos diga que se la escuchó a alguien más, probablemente “Al Herford”, vaya usted a saber, pero Mario en una charla de esas picosas, decía, “es que el uno, siempre va antes que el 2, menos en el 21, porque ahí sí el 2 se chingó al uno”.

En este asunto lo que no está claro, es de cual 2 hablan, porque al voltear a ver a un edificio de cantera, y sabiendo lo que dicen los que tienen que ir a rendir pleitesía a ese inmueble, pues de plano hay que señalar que ni siquiera está muy claro quien ocupa ese lugar, antes las cosas eran claras, el dos era el dos y punto. Hoy la confusión es enorme y no hay quién la explique o bueno, las explicaciones que dan siguen hablando de un “Vice” que actúa como “la mano del rey”.

Es más, hay quién se atreve a decir que hay dudas sobre si “uno” decide o si pasa que deja en ese otro todas las decisiones.

Sea como sea, el asunto es que desde un modulo de San Guillermo dicen que se cumplió con las formas y que si el 2 no informó, o no informó bien, o sí 1 no escuchó o no puso atención, pues ya esa es otra historia, como dijera la nana aquella…

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Andrés Manuel López Obrador simplemente es un genio perverso, tiene una locura absolutamente impresionante, pues mire usted que salir a decir que si en Estados Unidos condenan a Julian Assange, “hay que iniciar la campaña para que desmonten la estatua de la Libertad de Nueva York”, de plano es una estupidez enorme, es kafkiano el asunto.

De entrada hay que recordar que Julian Assange, está detenido y Estados Unidos lo quiere juzgar por todo el escándalo de WikiLeaks, lo acusan de alto espionaje y de pirateo informático.

Y claro, nuestro loquito aprovecha el tema, para hacer escándalo, para salir a pedir por la libertad, mientras que él en nuestro país todos los días lanza ataques en contra de la prensa que le destapa su corrupción y la de su familia.

Pide libertad de expresión para un australiano acusado en el extranjero, pero no la pide y no la permite para mexicanos que viven en México.

Pero el asunto no es pedir libertad, el asunto es hacer escándalo, sorprender con una locura mayor que tape los problemas que sí requieren solución.

Vivimos en un país en guerra, estamos ante un verdadero estado fallido, el crimen organizado no es combatido, la violencia es en todas las entidades, el narco lo mismo asesina periodistas que sacerdotes, tenemos un aeropuerto vacío que costó miles de millones de pesos y no funciona, inauguró una refinería, que todavía no está lista para empezar a funcionar, la economía del país es un desastre, la inflación desbocada y ahora si a las instituciones se las está llevando el carajo.

Pero nuestro presidente se para frente a las cámaras en la mañanera y le canta un tiro a los Estados Unidos y pide mandar desmontar la estatua de la Libertad, como un país que da vergüenza y tenemos un presidente que está loco y en su locura cree que está jugando al genio, para engañar a las mayorías, lo peor de esto, es que él sigue teniendo a las mayorías de su lado, estamos mucho, muy jodidos y no hay otra forma de decirlo…