Migrantes una tragedia con culpables…
Otros a pagar el plato por estrategia…
El PAN respondió como amigo solidario…
Y Marcelo viene sólo a hacer campaña…
Calificación mínima de 7 en la Uach…
La multa al PRI sólo otro clavo al ataúd…
El presidente Andrés Manuel López Obrador es el gran culpable de la crisis migrante del país, en donde cientos de miles de ciudadanos de centro y sur América, lo mismo que africanos y cientos de personas que vienen de otras partes del mundo, llegan queriendo utilizar a nuestro país como “trampolín” para ingresar a los Estados Unidos, esto debido a sus mentiras, a sus falsos programas y la falta de una verdadera acción de gobierno ante esa gran tragedia humana de alcances mundiales como lo es la migración por hambre o por miedo.
El incendio en las instalaciones del Instituto Nacional de Migración, que está a unos pasos del cruce fronterizo Lerdo-Stanton, es una tragedia enorme, que se suscita por esas falsedades, por la falta de gobierno, por una actuación pésima de las autoridades que salieron a la calle a realizar una “redada” de inmigrantes a quienes llevaron para encarcelarlos en ese edificio y anunciarles que se iba a iniciar el proceso de deportación a sus países de origen. Y claro, los detenidos protestaron y trataron de conseguir la liberación quemando las colchonetas, pero el fuego se salió de control y el saldo ya es de 40 migrantes muertos y otros 30 con heridas graves.
El Peje cuando asumió la presidencia y desde la campaña, anunciaba que en México se abrirán planes y programas de empleo para los migrantes que llegan del sur y también para evitar que nuestros paisanos siguieran huyendo al vecino país del norte “a buscar la vida” y muchas veces solo encontrar la muerte.
Fue el 17 de enero del 2019, cuando el presidente con el cinismo que le caracteriza, afirmó que “México recibe con una sonrisa a los migrantes” que llegaron en caravana a la linea fronteriza entre Guatemala y Chiapas. Y es que el anuncio era que en nuestro país tendrían trabajo y una visa para legalizar su estancia.
Ese 17 de enero, se les dio a conocer a los de la caravana, que solo tenían que registrase, llenar unos cuantos papeles y se podían quedar hasta un año en nuestro territorio. Los migrantes gritaban y coreaban ¡Viva México!, fueron poco más de mil los migrantes que se registraron, mientras otros muchos más simplemente entraron al país como Juan por su casa y se dirigieron a la Ciudad de México, para después seguir su camino buscando la franja fronteriza con los Estados Unidos.
En ese entonces se dijo, hay manos criminales que están organizando esas marchas, hay manos criminales en todo el recorrido, se denunció desaparición de personas, trata, prostitución forzada violaciones y el hecho de que esas movilizaciones estaban siendo usadas para el trafico de drogas.
Ninguna denuncia fue atendida.
Para el 22 de abril siguiente, las escenas eran de migrantes corriendo despavoridos, ante una emboscada del INM y la Policía Federal mexicana. Los migrantes cruzaban alambradas de púas para huir por el monte. Pero eso sólo fue para darle una prueba al gobierno de los Estados Unidos, que se estaba “haciendo algo” para frenar a las caravanas de migrantes, pues días después las cosas volvieron a “la normalidad”, es decir, todo mundo entra y se mantiene todo el aparato criminal en torno a la migración.
Han sido meses, en los que distintas voces señalaron la necesidad urgente de que el Gobierno Federal actuará en la fronteriza Ciudad Juarez, a donde cientos de migrantes llegan a diario, donde la frontera está cerrada, donde era necesario hacer algo, pero para el desgobierno de la Tde5a, no pasaba nada y cerraron los ojos.
La tragedia de este lunes por la noche, es un acto criminal, hay culpables que deben ser señalados, desde los elementos de Migración que no les abrieron las puertas a quienes a gritos pedían auxilio, hasta el delegado de Migración en la entidad, el representante del Gobierno Federal, que sobre ese tema no hizo nada y por supuesto, una larga cadena que llega hasta un presidente mentiroso, que en su mañanera decía, “fue un accidente en un albergue”…
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Y mientras el Gobierno Federal habla de tragedia, de accidente, de inmediato en redes sociales se “activaron” los grupos de golpeteo de la Tde4a, para tratar de echar las culpas a otros, unos dirigiendo ataques a la administración estatal, otros tratando de señalar que el gran culpable es el alcalde de la fronteriza.
De igual forma, empezaron a tratar de distraer la atención con otros temas, como lo es el pasado priista o panista de los funcionarios del INE.
En el Congreso del Estado, los diputados de Morena, como Benjamín Carrera, tratando de “posicionar” el tema de la Torre Centinela.
Ellos están haciendo su trabajo, quieren distraer la atención, quieren generar confusión, quieren que otros paguen sus culpas.
No cabe duda, tanto la gobernadora María Eugenia Campos, como el alcalde de la fronteriza Cruz Pérez Cuéllar van a tener que trabajar horas extras para no “resultar” como los grandes culpables, cuando ambos en distinto momento señalaron la necesidad imperiosa de una intervención mayor de la presidencia y de la propia cancillería mexicana ante esa tragedia de migración, que hoy es un crimen con 40 muertos…
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Y el PAN de Chihuahua por su parte, perdido en el espacio, tardaron horas en responder, en hacer un señalamiento y cuando lo hicieron, se portaron como si fueran el “amigo más solidario” con el presidente, “lamentando la tragedia”, sin señalar culpables, sin pedir cabezas, incluso, hasta dejando de lado a las víctimas, a cambio de presentar “una posición política amigable y correcta”.
Se les olvido de plano que el Peje cuando se presentó la tragedia de la Guardería ABC, cuando él era un aspirante a la presidencia, pedía quemaran con leña verde al presidente, a la primera dama, a todo mundo y sostenía que esa tragedia era fruto de la corrupción y de un gobierno pusilánime.
Incluso todavía hace poco, Andrés Manuel volvió a sacar ese tema a colación, anunciando posibles investigaciones y señalando culpables, afirmando que rodaran cabezas. Y mientras tanto, el PAN de Chihuahua, sus diputados locales y federales, hasta parece que se chupan el dedo y se compadecen “de la tragedia”, cuando deberían de estar exigiendo una investigación y que se castigue a los culpables.
Cosa contraria pasó con los diputados federales de Morena, quienes de inmediato salieron a pedir una investigación y a exigirle cuentas a la gobernadora María Eugenia Campos, a quien querían hacer pasar como la responsable de esos hechos.
De plano de nueva cuenta los panistas entregaron la plaza y se le entregan a un “enemigo” que cada vez que puede se les lanza a la yugular y los acusa de todo, es decir, de nuevo fueron incapaces de marcar rumbo en una narrativa que para los ciudadanos está muy clara, hay culpables y no los señalaron.
La única que alzó la voz a nivel federal fue la diputada Daniela Álvarez, quien en una conferencia de prensa dada en San Lázaro, lo dijo muy claro, desde hace meses han estado pidiendo la intervención del gobierno federal y no hicieron nada y se les lanzó duro a sus homólogos de Morena, al señalar que ellos si estaban tratando de culpar a la gobernadora panista cuando todo el tema de migración, de la detención de los migrantes, del lugar a donde los llevaron son asunto de la Federación y nada más.
Pero nada más ella hizo lo correcto en la Ciudad de México, conferencia de prensa que para colmo, no tuvo eco en nuestra entidad.
Eso sí, el todavía líder nacional del PAN, Marko Cortes, en su cuenta de Twitter, escribió: “Esto es inadmisible! Es un crimen de Estado que merece la inmediata renuncia de Marcelo Ebrard, Adán Augusto López Hernández y Francisco Garduño Yañez por su complicidad y responsabilidad.
Agentes del Instituto Nacional de Migración en Ciudad Juárez vieron el incendio, salieron y dejaron encerrados a los migrantes”. Pero bueno, ya saben ustedes que Markito solo sabe hacer presencia en redes sociales y lo que él dice, tiene un impacto similar al golpe que puede dar un mosquito con sus alas…
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Tras el crimen horrendo, que costó 40 vidas -en el conteo al momento de presentar esta entrega-, la corcholata llamada Marcelo Ebrard anuncia una visita a la fronteriza, para venir a ver cómo está el problema de los migrantes.
Sonó a burla el anuncio, a mero acto de precampaña de una corcholata que por ratos parece que se cae y qué le deja el camino libre a Claudia Sheinbaum.
Hace unas semanas Marcelo estuvo en Ciudad Juarez y no hizo nada, no cambio nada, su visita nada más fue para la foto, para hacer campaña con miras al 2024 y ahora una nueva visita seguramente será algo similar.
Casi se puede decir que su visita es una burla, una revictimización, un demostrar que no hay gobierno, que nada más hay activismo…
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Ya en otros temas, la Universidad Autónoma de Chihuahua anunció que como nueva regla, la calificación mínima aprobatoria seria 7 y no el 6, como se viene aplicando desde hace décadas. Esa medida habría que decir es regla que aplican desde muchos años otras instituciones universitarias nacionales e internacionales, quienes tomaron esa resolución con el fin de elevar el nivel de sus estudiantes y de los futuros profesionistas. Incluso hay algunas donde la calificación mínima es el 8.
La idea es clara, dejar de lanzar a la calle a profesionistas que pasan de panzazo, que ejercen con los conocimientos mínimos indispensables y que en muchas ocasiones dan hasta vergüenza.
Pero mas tardaron en la Uach en dar a conocer esa medida, que de inmediato estudiantes de Medicina, salieron a tratar de ejercer su derecho a la estupidez, a ser mediocres y exigen que se quede el 6 como calificación mínima aprobatoria.
El colmo sería que la Universidad Autónoma de Chihuahua, una vez más sea rehén de las minorías y que se le preste oídos a esos que exigen los dejen en la mediocridad…
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La multa que le impusieron al PRI, por los malos manejos durante la administración de César Duarte, habría que decir, es el castigo a “los usos y costumbres” de todos los partidos políticos, quienes “cuadran” “donaciones forzadas” de sus funcionarios estatales, municipales y federales desde hace años.
Muy duro el golpe al PRI, es dejarlo sin dinero para campañas ni para sus operaciones normales.
Quizá, solo quizá, ese golpe sea la excusa perfecta para abandonar la alianza opositora, esa que todos los días parece que naufraga y que ahora Alito tiene la posibilidad de decir, que no pueden ir juntos, porque no tienen dinero para completar su parte.
Insistimos, todos los días el PRI da muestras fehacientes de que se muere, que está en agonía y esta multa es un clavo más para su ataúd…
