Francisco Oropeza, responsable de las muerte de cinco personas en Texas fue capturado este martes por el FBI

62

Francisco Oropeza, quien disparó con un rifle AR-15 a una familia hondureña la semana pasada acabando con la vida de cinco personas, fue detenido este martes por la policía de Texas y ahora enfrenta por asesinato.

La tarde de ayer  el FBI daba por terminada la búsqueda del sospechoso del trágico episodio de violencia que tuvo lugar en Texas, donde el hombre se enfrentó a cinco de sus vecinos tras que estos le pidieran que dejara de disparar en su patio con un fusil de asalto. Luego de que estallara la discusión, Francisco Oropeza abrió fuego, matando a cinco vecinos originarios de Honduras, incluido un niño de 8 años.

Una tragedia que conmocionó a toda una comunidad

El suceso tuvo eco en medios internacionales, a la par que la comunidad de Houston, particularmente la latina alzara la voz en la búsqueda de Justicia para cada una de las víctimas  de la lamentable tragedia. Este martes, las autoridades del condado de Montgomery en Texas reportaron la captura de Oropeza  como un evento “sin incidentes”.  De acuerdo a reportes el hoy imputado por asesinato, cuenta con nacionalidad mexicana y habría sido deportado de Estados Unidos cuatro veces entre 2009 y 2016.

La captura ocurrió en la localidad de Conroe, a sólo 32 kilómetros de Cleveland, una ciudad de 8.000 habitantes al noreste de Houston donde aconteció el violento incidente contra las víctimas de origen hondureño. De momento las autoridades continúan indagando sobre cómo fue  obtenida el arma utilizada por Oropeza, un rifle estilo AR-15.

Con una operación a nivel Estatal y Federal que involucró a más de 250 elementos, Oropeza se convirtió en uno de los criminales más buscados del país de las barras y las estrellas, y, ciertamente, el más buscado de Texas.  Incluso el gobernador del estado, Greg Abbott,  se pronunció al respecto  expresando su profunda indignación y condenando el asesinato de  los “ inmigrantes ilegales”. Abbott También ofreció una recompensa de US $50 000,  mientras que el FBI ofreció una por US $80 000.

 

Oropeza fue detenido luego de que el FBI recibiera información a través de su línea telefónica, siendo arrestado apenas una hora después de contar con su localización exacta alrededor de las 6:30 p.m. por la tarde del martes, declaró el agente especial  del FBI en Houston, Jimmy Paul. Tanto el Servicio de Alguaciles, como el Departamento de Seguridad Pública de Texas y la Patrulla Fronteriza realizaron el arresto de Oropeza, detenido por cinco cargos de asesinato y una fianza de US $5 millones.

¿Los actos de Francisco Oropeza pudieron ser prevenidos por las autoridades locales?

Y es que está denuncia ciudadana le permitió al FBI  concluir exitosamente la búsqueda, pues el buró había informado que después de cuatro días de extensa investigación, aún no se contaba con ningún indicio sobre la localización del  hasta el momento prófugo de la ley.  Las diversas entrevistas con la esposa del hoy detenido ciudadano mexicano de 38 años, tampoco habían sido fructíferas.

Wilson García ha declarado que pidió a Oropeza que dejara de disparar, pues su bebé de un mes de edad no dejaba de llorar por el ruido del rifle automático. La familia hondureña habría realizado al menos cinco llamadas previas a la policía, quien aseguró que sólo contaban con tres agentes para cubrir un área de 1.800 kilómetros cuadrados. Esta no era la primera vez que sus vecinos llamaban a la policía para pedir que su vecino dejara de disparar su metralleta.

Sonia Argentina Guzmán, de 25 años y esposa de Wilson, fue la primera víctima, así como también otro hijo de la familia, Daniel Enrique Laso de 9 años. Dos mujeres más perdieron la vida en el lugar, Diana Velazquez y Julisa Molina, quienes han sido identificadas como compañeras del grupo de iglesia de la pareja, quienes murieron mientras intentaban proteger al bebé de un mes y a una niña de dos años presentes en el tiroteo. También existió una quinta víctima, Jose Jonathan Casarez de 18 años.