Priscila Loera, protagonista del secuestro más largo en la historia de la CDMX

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Esta joven estuvo secuestrada por más de dos años en la Ciudad de México y sí, su familia pagó rescate en más de dos ocasiones.

Fueron más de dos años los que Priscila Loera estuvo secuestrada en la Ciudad de México. Dos años en los que su familia sólo sabía que estaba viva porque los plagiarios se los dejaban saber a través de fotografías en donde la mostraban con los periódicos del día.

La historia de Priscila toma relevancia en el marco del secuestro lamentable del universitario Norberto Ronquillo, quien fue asesinado por sus captores luego de ser pagado un rescate por parte de sus familiares. Priscila Loera se convirtió hace unos años, en la protagonista del secuestro más largo en la historia de la CDMX tras permanecer secuestrada dos años, dos meses y ocho días en cautiverio.

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Todo comenzó en el 2007

En ese año, Priscila Loera fue secuestrada en la colonia Pro Hogar, en la alcaldía Azcapotzalco poco después de haber cumplido los 18 años y previo a graduarse de la preparatoria, tal y como sucedió con Norberto que fue privado de la libertad días antes de graduarse de la universidad.

Tras haber pagado un primer rescate, Marco Loera García, padre de Priscila, no supo de su hija más que por cartas y fotografías enviadas a su domicilio, en donde se veía a la joven portar periódicos con la fecha en la que era tomada la imagen, para comprobar que todavía seguía con vida.

Fue en el año 2009, específicamente en el mes de octubre, cuando la familia pagó un último rescate después de dos años secuestrada. Marco Loera, empresario con estabilidad económica, perdió su flota de camiones por pagar los rescates de Priscila, adquirió deudas que posteriormente no pudo pagar, razón por la cual fue demandado y posteriormente encarcelado.

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Así fue encontrado el cuerpo de Priscila

Después de más de dos años de permanecer secuestrada, el cuerpo de Priscila fue encontrado en un paraje cercano a Huitzilac, en Morelos, aunque los restos en ese momento no pudieron ser identificados. Debido a esto, fueron enviados a una fosa común en donde permanecieron hasta el año 2013.

Tras investigaciones de la Procuraduría General de la República, se determinó que los restos eran de Priscila e informaron a la familia que la habían encontrado, aunque no indicaron en qué condiciones, por lo que creyeron que tras seis años, la joven seguiría viva. En octubre del 2013, la PGR indicó que contrastó muestras de los restos de la joven con el ADN de personas que habían reportado como desaparecida a una mujer de entre 20 y 25 años.

A Priscila, según palabras de su padre, le cortaron los pabellones de los oídos, le fracturaron los dientes antes de ejecutarla, no tenía agua ni alimento en su cuerpo a la hora de encontrarla. Aunque se indica que la banda de Las Pelonas, responsable presuntamente también del secuestro de Norberto, es la culpable de este secuestro, hasta el momento sólo hay un detenido: el colombiano Nino Colman, quien fue sentenciado por el juez 28 penal, a finales del 2010, con un castigo de 60 años de prisión.