* Otorga un apoyo integral a estudiantes pertenecientes a algunos de los pueblos indígenas que habitan en la entidad, para que puedan continuar y concluir sus estudios satisfactoriamente; Noemí, un ejemplo
* Dentro del PUI la Coepi otorga becas económicas mensuales de mil 250 pesos a 85 estudiantes durante el periodo de un año, lo que representa una inversión anual de un millón 275 mil pesos.
El Gobierno del Estado, a través de la Comisión Estatal para los Pueblos Indígenas (Coepi), abona a la erradicación del problema de deserción escolar de estudiantes originarios en educación superior por medio del Programa Universitario Indígena (PUI).
El programa otorga un apoyo integral para que 250 estudiantes, integrantes de alguno de los pueblos indígenas que habitan en la entidad, puedan continuar y concluir sus estudios satisfactoriamente. Las y los beneficiarios pueden ser acreedores a una beca económica o alimenticia, a la condonación de pago de colegiatura, al apoyo en hospedaje o acceder a un programa personalizado de tutorías.
De esa cantidad, la Coepi se encarga de otorgar becas económicas mensuales por un valor de mil 250 pesos a 85 estudiantes durante el periodo de un año, lo que representa una inversión anual de un millón 275 mil pesos.
En este sentido, Noemí González Vega estudiante rarámuri del séptimo semestre de la Licenciatura en Finanzas y Contaduría, de la Universidad La Salle, proveniente de la localidad de Sisoguichi, del municipio de Bocoyna, compartió su testimonio acerca de los beneficios y la importancia de este tipo de esfuerzos emprendidos por las instituciones para poder continuar sus estudios.
Noemí comentó que durante mucho tiempo vivió con la incertidumbre de saber si podría o no seguir estudiando, debido a que la posibilidad de estudiar una carrera universitaria para algún estudiante indígena, es una opción que a veces parece imposible.
“Yo y mis hermanas hemos contado siempre con el apoyo incondicional de la familia. Mi madre y mi padre dejaron todo en la comunidad en la que vivíamos para darnos la oportunidad de labrar un nuevo camino, sacrificaron lo que ellos ya habían construido para darnos una mejor vida y eso lo valoro profundamente, sin embargo, al llegar a la ciudad no sabíamos que hacer o a dónde acudir.
Mi hermana fue la primera que, gracias a su esfuerzo y su deseo por lograr una carrera, se acercó a las oficinas de la Coepi y preguntó acerca del programa y sus requisitos. Ella ya concluyó su carrera, es la primera persona de nuestra familia que lo ha hecho, y por eso es mi fuente de inspiración para continuar mis estudios.
El apoyo del PUI ha sido muy importante, sin esto me hubiera sido imposible continuar. La beca me da la posibilidad de enfocarme por completo en mi carrera, de disfrutar con plenitud la vida como estudiante. Con ella adquiero materiales que necesito, algunos útiles, vestimenta, compro comida, pago el transporte, y también suelo ahorrar una parte para poder participar en algunos eventos organizados en la Universidad o para alguna emergencia.
A las personas indígenas interesadas en seguir estudiando les diría que lo hicieran, que al principio van a tener un escenario difícil, pues mudarse de una comunidad serrana a la ciudad se convierte en algo muy complicado, y en ocasiones por ser indígena es aún más difícil. Encontrar un nuevo hogar, tratar con personas diferentes, conseguir empleo, transportarse y en general el día a día, son retos al cuales muchos tememos, pero de los que somos conscientes que debemos afrontar para cambiar nuestra realidad.
Cada esfuerzo vale la pena y los resultados obtenidos por jóvenes como yo, lo demuestran. Es muy necesario que cambiemos la forma de pensar, porque a veces no nos damos cuenta que hay más oportunidades y nosotros como integrantes de los pueblos indígenas tenemos el derecho de ser partícipes de ellas. Si queremos apoyar a nuestras comunidades e impactar de manera positiva en ellas el estudio siempre será la mejor herramienta”.
Otro de los puntos que se busca promover a través del PUI es la creación de una Red de Solidaridad entre la población participante, con el fin de contar con un grupo de apoyo que potencialice el impacto del programa e incremente la incidencia.
Las instituciones que participan en el programa son: la Comisión Estatal para los Pueblos Indígenas (Coepi), Universidad Autónoma de Chihuahua (UACH), Escuela Normal Rural Ricardo Flores Magón (ENRRFM), Escuela de Enfermería Florencia Nightingale, Universidad La Salle (ULSA), Universidad Tecnológica de Chihuahua (UTCH), Escuela de Antropología e Historia del Norte de México, Instituto Tecnológico de Chihuahua, Instituto Tecnológico de Cd. Jiménez, Universidad Tecnológica de la Tarahumara, Isthmus Norte Escuela de Arquitectura y Diseño de América Latina y El Caribe, Escuela Normal José E. Medrano y el Centro Universitario de Chihuahua.
