‘Recibo un trato cruel e injusto’: ‘El Chapo’ Guzmán denuncia malos tratos en prisión

95

“He sufrido mucho”, expresó el capo mexicano en una carta en la que señaló que ni siquiera cuando ha presentado problemas de salud ha sido tomado en cuenta.

Tras casi tres años de permanecer encerrado en el penal de máxima seguridad ADX, Florence en Estados Unidos, Joaquín ‘El Chapo’ Guzmán denunció recientemente que el trato que recibe ahí es ‘cruel e injusto’.

A través de una misiva a la que tuvo acceso la cadena Univisión, el narcotraficante más famoso de México, dio a conocer las condiciones en las que vive su cadena perpetua tras ser declarado culpable de diez delitos relacionados con el tráfico de drogas y  lavado de dinero.

cultura-colectiva-news

¿Qué dice la carta de ‘El Chapo’ Guzmán?

A lo largo de siete páginas, ‘El Chapo’ presentó una queja contra el director del Buró Federal de Prisiones (BOP) Michael Carvajal y de los funcionarios del penal ADMAX Florence, al cual llegó en julio de 2019.

“Soy un mexicano de 64 años y fui extraditado de México a Estados Unidos en enero de 2017″, comienza el documento, escrito en inglés y que el capo firmó remarcando “Joaquín Guzmán L”.

En su demanda civil, el exlíder del Cártel de Sinaloa, quien anteriormente escapó a través de un túnel de una prisión mexicana de máxima seguridad, dijo que ahora se encuentra bajo “revisiones constantes dentro de su celda, cámaras de vigilancia hasta en el sitio en donde conversa con sus defensores legales y un análisis minucioso de las cartas que ha escrito, son algunas de las medidas que toma el gobierno para evitar que se fugue”.

cultura-colectiva-news

Denuncia problemas de salud y malos tratos

De igual manera mencionó que “debido al trato en ADMAX ahora yo padezco dolores de cabeza, pérdida de la memoria, calambres musculares, estrés y depresión. El trato que recibo es cruel e injusto y me está causando que sufra problemas psicológicos y de salud. Yo rezo para que esta corte intervenga”.

En su declaración, Guzmán Loera señaló que le han negado atención médica. Él narra un incidente sucedido en julio de 2021, cuando estaba tosiendo “incontroladamente” y tenía el pecho congestionado, pero “nunca recibí tratamiento médico”.

“He sufrido mucho estando en confinamiento solitario. Mi presión arterial se ha elevado, llevando a dolores de cabeza y ansiedad. A veces olvido cosas”, detalló el traficante.

Acusa también que le sirven poca comida “y a menudo me quedo con hambre”, además aseguró tener un trastorno del sueño porque despierta después de la medianoche ocasionado por el calor de la ventilación que es “extremadamente” fuerte y sale cada quince minutos entre cuatro y cinco veces. Eso ocasiona que su corazón comience a latir rápidamente, elevando su presión arterial.

“No tengo contacto humano”

En la prisión ADMAX de Florence, describió Guzmán, que pasa todo el día en una celda de 7 por 12 pies y con una pequeña ventana por donde le entregan una charola con alimentos. La celda está en la ‘Unidad H’, una zona de alta seguridad donde la acompañan convictos de terrorismo.

Al llegar a ese penal, contó que le permitían salir  a una jaula en el patio de 9 a 10 horas por semana, pero desde diciembre de 2019 ese tiempo se redujo a 3 horas o nada. Esa jaula de 10 por 10 pies es el único lugar donde puede ejercitarse.

Asimismo, reveló que el gobierno tampoco le permite tener contacto con otros reos, limita sus llamadas telefónicas a cuatro familiares (su madre, su hermana y sus hijas), impide que los guardias hablen con él y cada vez que lo visita su abogada acude esposado de pies y manos.

Estoy descartado de tener cualquier contacto verbal o comunicación con otros presos”, reclamó Guzmán. “No tengo contacto humano, más que cuando los guardias ponen y remueven mis grilletes”.

Finalmente dijo que “aunque yo no comparto una celda y estoy dentro de mi celda 24 horas al día, funcionarios de la prisión entran a mi celda varias veces por semana para hacer registros de rutina, cuando ellos mueven y tocan todas mis pertenencias”.

De acuerdo con el citado medio de comunicación, el Departamento de Justicia no ha respondido a la querella ya que el pasado 12 de julio, el juez Michael Hegarty, aprobó una moción para que se realice hasta el 15 de junio y programó una audiencia para el próximo 7 de julio, por lo que el capo mexicano deberá mantenerse bajo las mismas condiciones.