Estudio revela que los perritos lloran de felicidad al reencontrarse con sus dueños

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Un grupo de científicos japoneses descubrió que los lomitos sienten una gran emoción al ver a sus dueños.

Los perritos son sin duda de los seres que más amor, diversión y aventuras te pueden dar y debido a que llevan siglos como acompañantes de las personas, existen actitudes en su naturaleza que aún siguen siendo una incógnita para nosotros.

En el pasado se han hecho estudios que demuestran los lomitos sienten algunas emociones similares a las de los humanos, tales como la tristeza y los celos, pero hasta ahora, existía la duda, si las lagrimas que a veces podemos ver que salen de sus ojos, son en realidad son una reacción a algún sentimiento, o simplemente es una manifestación de su cuerpo.

Ahora un grupo de científicos en Japón llevó a cabo un estudio en que se llegó a la conclusión de que los perros lloran de felicidad cuando se reencuentran con sus dueños.

Según la investigación publicada en la revista Current Biology, estas lágrimas parecen estar vinculadas a un incremento de los niveles de la llamada hormona del amor, la oxitocina.

“Descubrimos que los perros derraman lágrimas asociadas a emociones positivas”, explicó Takefumi Kikusui, investigador de la Universidad Azabu, en Japón, y coautor de dicho ensayo.

El equipo de investigadores resaltó que este es el primer estudio que comprueba que una emoción positiva provoca la secreción de lagrimas en los canes y que la oxitocina interfiere en este proceso.

El estudio llegó a esta conclusión, al medir el volumen de lágrimas de 18 perros que se reencontraron con sus cuidadores después de estar separados entre cinco y siete horas.

Los científicos pudieron notar que cuando el animal recibía a su dueño, se observaba una mayor producción de lágrimas en los primeros cinco minutos del reencuentro, esto en comparación con lo habitual.

Además hicieron el mismo experimento con los canes y personas que no eran cercanas a ellos, y ahí fue en donde se notó la diferencia, ya que la secreción de lágrimas no aumentaba.

Kikusui reveló que aún falta investigar más acerca de cuál es la función social de la secreción en los perros.