ÚNETE: la campaña de la ONU contra la violencia hacia las mujeres

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El 25 de noviembre es el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres. Cada año se recuerda esta fecha a partir del caso de las hermanas Mirabal, quienes fueron asesinadas en República Dominicana por órdenes del dictador Rafael Leónidas Trujillo. “Las Mariposas”, como se conoce a las tres hermanas, exigían el fin de las injusticias y la violencia hacia las mujeres.

Para conmemorar esta fecha, en la que se recuerda que la violencia hacia las mujeres sigue siendo un problema de proporciones pandémicas contra el que hay que luchar, organizaciones internacionales usan el color naranja. Este es un símbolo de un futuro brillante en el que deje de existir la violencia hacia las mujeres y niñas. Sin embargo, todavía hay mucho por hacer.

De acuerdo con la ONU, una de cada tres mujeres en todo el mundo ha vivido violencia en algún momento de su vida. En México son dos de cada tres. Y la pandemia de Covid-19 incrementó esta violencia: las llamadas relacionadas con episodios de violencia a números de asistencia se quintuplicaron. En el caso de nuestro país, los datos oficiales indican que, durante el primer mes de emergencia sanitaria, las llamadas al 911 por situaciones de violencia contra las mujeres aumentaron un 22.3%.

La ONU destaca la manera en que la pandemia ha impactado la vida de las mujeres: los factores de riesgo se incrementaron, se obstaculizó el ejercicio de sus derechos humanos y el acceso a servicios de salud. Además generó la pérdida de miles de empleos y provocó inestabilidad económica. Eso, a su vez, dejó en evidencia la crisis en el trabajo de cuidados y, como apunta la organización, amenaza con borrar décadas de progreso para las mujeres y niñas.

Este 25 de noviembre, conocido como Día Naranja, la ONU presenta la campaña ÚNETE, con la que recuerda de la importancia de “avanzar hacia una recuperación socioeconómica sostenible e incluyente tras la pandemia por Covid-19”. Y un paso crucial para lograr la erradicación de la violencia contra las mujeres es el de transformar las normas sociales dañinas, “incluyendo las prácticas nocivas de género que perpetúan la violencia y discriminación”.