Te cobró para protegerte, tú déjate…

Las multas que encabronan al ciudadano… Reporteros infectan Palacio, visitantes no… La Coparmex realiza cambió de presidente… El Peje dice que todavía hay lana en caja…

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Las multas que encabronan al ciudadano…
Reporteros infectan Palacio, visitantes no…
La Coparmex realiza cambió de presidente…
El Peje dice que todavía hay lana en caja…

Lo señalamos en una pasada entrega, multar al ciudadano por que viajan más de dos adultos en su vehículo particular, es un exceso, es una medida que se presta a que al ciudadano lo jodan y que lo hagan encabronar mucho más que con aquellas fotomultas en los aciagos días de César Duarte.

Se entiende a la perfección que pudiera tener un cierto nivel de justificante para evitar los contagios, pero es un exceso, pues Chihuahua es una ciudad en donde se habla de que prácticamente hay dos vehículos cada tres personas.

Y claro que el ciudadano no piensa que la medida es por seguridad, por concepto de salud, claro que no, “esto es un pinshe invento del gobierno para jodernos y robarnos”, es la exclamación que cunde en las redes sociales.

Y es que les volvió a pasar como con otras muchas otras cosas que emprende este gobierno amanecido, es decir, les falló la comunicación, no se dieron el tiempo para socializar la medida, claro, el aldeano golfo gringo tenista cree y está convencido de que sus expresiones en redes sociales y su programa semanal en Canal 28, ese por el que paga una millonada, son suficientes para que todo mundo este enterado de lo que él dice, de lo que él piensa, de lo que a él se le ocurre ordenar.

Por eso le falla la comunicación, insistimos, la medida a algunos nos puede parecer buena, para que la raza norteña entienda de que tamaño es el peligro que nos tiene encerrados en nuestras casas y que debemos de aplicar todas las medidas de prevención necesarias; pero acciones de ese tipo deben de primero comunicarse a todos, plantear campañas informativas y además, antes de soltar a los perros a la calle, a quienes soltaron hambreados y sin explicarles que no van a multar, que primero tienen que orientar al ciudadano.

Pero claro, se junto el hambre con la necesidad, con el abuso y el pendejismo y todos juntos en tropel salen a la calle y el que se jode es el ciudadano.

Los memes de nuevo son muchos, prueba irrefutable del ingenio mexicano y del tamaño de la molestia, dos en especial llamaron la atención, uno de los más claridosos es el que muestra a varios agentes de vialidad en caravana agradeciéndole a Corral que les brindo el pretexto ideal para volver a “morder” a los automovilistas, pues con la contingencia si hay una baja considerable de vehículos circulando y eso les bajó considerablemente la oportunidad de hacer los asaltos que todos los días hacen.

El segundo meme, simplemente es genial, muestra al genio Albert Einstein, con el dedo índice en la cien, en actitud de “piensen”, señalando: “¡Dormimos juntos!, ¡vivimos juntos!, ¡comemos juntos!, pero no podemos ir juntos en el carro…” y remata la frase un texto que pregunta “¿a que persona tan inteligente se le ocurrió esa medida?”.

No hay más que decir al respecto, basta con escuchar la molestia que crece, como el hecho de que ordenaron que en los supermercados deben de dotar de cubrebocas a sus clientes, y claro que ni los Mares, ni los Muñoz, ni los hermanos árabes de la otra tienda o los gringos de la tiendas color azul hacen caso a la medida, no hay quien los obligue ni nada, pero al ciudadano si lo multan por viajar con dos personas con las que vive y trata todos los días en su carro.

En fin, ojalá y que la contingencia pase pronto, porque a los muy vivos estos capaz y que se les ocurre multar a quien viva con más de dos personas en su casa y eso si va a estar de la reching…

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Este martes en uno de los “chat” de reporteros que cubren la fuente de Gobierno del Estado, se presentó una queja seria de parte de los compañeros que corretean la nota en esos pasillos, pues señalaron que mientras a ellos no les permiten el paso a esas instalaciones, señalando que es por la contingencia de salud, todos los días se puede observar a los guardias y otros empleados sin el cubrebocas, lo mismo que a visitantes que tampoco cumplen ninguna medida de seguridad y hasta niños acompañados de sus padres.

Javier Arroyo, parte del equipo de comunicación, siempre tratando de ser muy diligente, salió al quite y dijo que los guardias de Palacio todos los días están exigiéndole a los visitantes que se coloquen el cubrebocas al entrar.

Pero el dato vale para señalar que si Palacio cumpliera con las reglas que el gobernador dictó, de entrada no deberían permitir el acceso a esas instalaciones de “visitantes” y si lo permiten, es porque tienen algún asunto que atender y no deberían de ir acompañados de menores.

Y lo que es peor, si esos menores son hijos de alguna trabajadora o de algún trabajador que no tiene con quien dejarlos en sus casas, para ir a trabajar, entonces eso indica que ni siquiera se tiene la precaución de mandar a esas madres de familia o a esos padres de familia a que hagan “Home Office” y la administración amanecida es tan mal patrón, como los que siguen tercos a no cerrar su changarro y obligan a sus empelados a cumplir con sus horarios de trabajo.

Para colmo, así como le ordenaron a los negocios, tiendas y demás que ellos les entreguen a sus clientes cubrebocas y les den gel antibacterial a la entrada y salida, pues entonces en Palacio deberían de estar haciendo lo mismo o simplemente digamos que en la casa del panadero, ni tortillas hay para echarse un taco, menos teleras para un lonche …

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Este martes el sindicato patronal anunció el cambio de presidente, salió Federico Baeza y entró Jorge Rodrigo Cruz Camberos, ¿relevante el cambio?, no, para nada, y digamos que ese sería el centro del comentario, pues la Coparmex tiene un par de años, quizá menos, como cuatro o cinco, que no levanta, que camina por la obscuridad y ha dejado de ser voz sería, que para colmo de ellos, se podría decir que se quedaron mudos y nadie los extraña.

Perdieron seriedad, perdieron rumbo y no saben ser lo que deberían de ser.

¿La culpa es de a quien ponen de presidente, del consejo o de los dueños?, no es posible descifrarlo, pero todos ellos tienen algo de culpa.

Bastaría con decir que los dos últimos presidentes al parecer ni sabían que tenían que serlo de tiempo completo. Pero además como que quedaron demasiado “chiquitos” ante la responsabilidad tan grave que significa ser presidente del sindicato patronal y por eso dejaron de ser voces a quienes escuchar o a quienes acudir a pedir opinión sobre los temas álgidos del día.

Ahora bien, el consejo de la Coparmex, es algo así como una larga lista de miembros de la realeza que ese puesto les sirve tanto como una medallita de boy scout o un nuevo prefijo al título nobiliario, es decir, para nada, como diría un amigo entrañable, “un asesor, asesora, un consejero aconseja, y si no lo hacen no sirven”, y eso se podría decir de la mayoría de ellos, el titulo solo les sirve para llenar un renglón más en su currícula social, que lo pueden poner junto a ser “socio del campestre” y les sirve para lo mismo, solo para identificarse y presumirse entre los de su misma ralea.

Y los dueños del Sindicato, poco a poco se han ido jubilando y otros ya fueron a entregar cuentas al Creador y a sus herederos el sindicato patronal no les interesa en lo más mínimo, incluso se podría decir que posiblemente y hasta les estorbe, por eso no lo cuidan como lo hicieron sus padres.

Total llega Jorge Cruz, ojalá y que el cambio sea bueno, ojalá y que los saque del marasmo en el que se encuentran y que hoy los tiene convertidos en no más que en un club social impulsor de candidaturas de quienes al gobernar no solucionan nada, ni hacen nada de lo que exigían se hiciera, bueno, salvo muy honrosas excepciones…

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Hace algunas entregas señalamos en este espacio que el Peje iba a seguir terco en sus planes y que no los iba a cambiar por la simple y sencilla razón de que hay quienes le dicen que él está en lo cierto y él está convencido de que así es.

También fuimos más allá al sostener que una de las que le habla al oído al presidente es Raquel Buenrostro, la titular del SAT, que es la que le dice que aunque hay pandemia y una crisis mundial, la administración pejiana todavía tiene lana en la caja y que ese dinero es suficiente para soportar la tormenta sin tener que sacrificar ninguna de las obras prioritarias para el país.

Pues bueno, hoy el presidente anunció que unas de las medidas que se van a tomar para amainar el derrumbe del precio internacional del petróleo, es exigirle a Pemex que ponga a trabajar a su máximo poder a las refinerías que hay en el país y así poder producir más combustibles nosotros mismos y no depender de las importaciones.

Así que aquellos que dicen que la caída internacional del crudo es suficiente para que el Peje deje de construir la refinería de Dos Bocas y que mejor se utilice ese dinero en un rescate financiero de empresas, la respuesta les ha de haber dolido como patada en ese lugar en donde la espalda pierde su casto nombre.

El Peje, lo dijo hace unos días, “la pandemia nos cae como anillo al dedo” y para él es cierto, incluso el desplome del precio del petróleo, el cual se origina por la caída monumental en el consumo de combustibles, de tal forma que en la balanza que él ve, es bueno, pues México deja de vender petróleo que si tiene y hoy está muy barato, pero deja de comprar combustibles que hoy no tenemos –o cuando menos no los suficientes- y que para colmo son mucho muy caros.

Pero además, el Peje lo dijo con todas sus letras en la mañanera, “hay dinero en caja, no tenemos necesidad de pedir créditos”, incluso contó que su reunión con el presidente del Banco de México, fue para decirle que no había la necesidad de pedir le “adelantarán” la utilidad del ejercicio 2020, la cual la debe de recibir su administración hasta abril del 2021, “porque hay dinero en caja”.

Fue duro al señalar que antes esa era la salida fácil de las anteriores administraciones y que por eso endeudaron al país, pues pedían créditos para salir al rescate de las grandes empresas y que el ejemplo más claro de esos rescates fue el gran robo llamado Fobaproa y que hora por su plan de austeridad y el combate a la corrupción, “hay dinero y no tenemos necesidad de pedir créditos”.

Los empresarios del país se jalan los pelos y dicen que el presidente está equivocado, mientras que AMLO y los suyos señalan que el camino de salir a pedir dinero solo sirve para hacer más grande el hoyo y no soluciona nada, salvo la economía y finanzas de los que más tienen.

Así que no hay que dudar mucho, Andrés Manuel va a seguir por la ruta que ya trazó “y topen chivas”.

En meses, veremos si tiene razón o si de plano su ruta nos lleva a un infierno peor que el que ya padecemos…

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A manera de posdta, les pedimos a todos ustedes una disculpa por la gran cantidad de errores “de dedo” de las pasadas entregas. El chiste fue que desde hace una semana traemos un pequeño problema de salud que nos hizo perder prácticamente la visión del ojo derecho y nos estaba resultando mucho muy cansado escribir y revisar lo mal escrito.

Hoy un amable lector nos hizo el señalamiento de forma mucho muy amable y se lo agradecemos.

La solución parcial es escribir con un tipo de letra más grande para que no nos resulte tan cansada la revisión.

La costumbre de un servidor es primero “vomitar” toda la entrega y ya luego en una segunda lectura hacer las correcciones, claro, se nos pela un que otro acento y una c por una s, cosas de esas que hasta a los más duchos le pasa y hasta en esos medios en donde se supone que hay un mar de gente trabajado y revisando se les pelan errores de esa naturaleza, con más razón a un servidor.

En fin, el problema de salud fue que la presión marcó 230/130 y claro que eso nos produjo un derrame interno en el ojo, no sabía que fuera hipertenso y el susto fue de primer nivel, ya estamos siguiendo las indicaciones del medico y le agradezco enormemente a mi amigo el cardiólogo Demetrio Kosturakis primero su amistad de muchos años y en segundo la molestia de atender al amigo como paciente.

También le agradezco al buen amigo Jorge Issa, él sabe porque y con eso basta.

No hay más que decir, y esperamos en Dios seguir dándoles lata a muchos otro buen rato y agradeciéndoles a todos ustedes la amabilidad de leernos.

Dios y su Santísima madre derrame sus bendiciones en los hogares de todos ustedes y que de los míos no se olvide…