Un jonrón de dos carreras de George Springer, en la parte alta de la onceava inclinó la balanza para Houston que venció 7-6 a los Dodgers en el segundo partido del Clásico de Otoño poniendo la serie mundial 1-1 y ahora viajan a Texas a continuar el duelo.
55 años y 11 entradas después, los Astros lograron el primer triunfo de su historia en Serie Mundial. George Springer conectó un jonrón de dos carreras en la entrada 11 y los Astros, que dejaron ir dos ventajas en el partido, vencieron 7-6 a los Dodgers para emparejar 1-1 la edición 114 del Clásico de Otoño.
La franquicia fundada en 1962 está en apenas su segunda Serie Mundial. En la primera, en aquel entonces como representante de la Liga Nacional, cayó en cuatro partidos ante los Medias Blancas. Pero ayer celebraron tras el partido que fijó un récord para la Serie Mundial: ocho jonrones en total.
La historia de sinsabores de este equipo parecía prolongarse aún más cuando en la décima entrada, después de tomar ventaja con jonrones espalda con espalda de José Altuve y Carlos Correa, Yasiel Puig dio un cuadrangular solitario y Enrique Hernández un sencillo productor, que empataron de nueva cuenta el partido. Todavía en la baja de la 11, a un out del triunfo, Charlie Culberson se la voló y puso el partido de nuevo a una carrera, pero Chris Devenski ponchó a Puig para poner el fin del encuentro.
Houston tomó la ventaja en la tercera entrada cuando el exdodger Josh Reddick pegó sencillo y anotó con imparable de Alex Bregman.
El pitcheo de los Astros, encabezado por el as abridor Justin Verlander, limitó en sólo cinco hits, durante 11 entradas, al bateo de los Dodgers. Verlander lanzó cuatro entradas y dos tercios sin permitir hit, hasta un cuadrangular solitario de Joc Pederson que empató el partido y en la sexta Corey Seager le dio un jonrón de dos carreras que puso a los Dodgers en ventaja.
El bullpen de los Dodgers ligó 28 entradas sin permitir carreras, una nueva marca para cualquier equipo en postemporada, pero en la octava, con ventaja de 3-1, Bregman le dio doblete a Brandon Morrow y anotó tras un sencillo de Carlos Correa ante la serpentina del estelar cerrado Kenley Jansen. En la novena, Marwin González se la botó a Jansen, que tenía 12 oportunidades de salvamento sin desperdiciar al hilo en postemporada.
El mexicano Fernando Valenzuela fue el encargado de lanzar la primera bola en una ceremonia muy especial.
