El exalcalde de Chihuahua Javier Alfonso Garfio Pacheco salió este domingo del CERESO de San Guillermo, su salida se registró pasadas las 18 horas y fue tras que el juez determino su sentencia de tres años de prisión y fincarle una fianza de 328 millones de pesos y una multa de 435 mil 515 pesos, esto tras que él se declaró culpable de haber firmado el acuerdo de venta de terrenos que eran propiedad del Gobierno del Estado a favor de la empresa del constructor Benito Tagle, terrenos por donde se supone va a pasar el nuevo periférico que arrancará de la salida a Ciudad Juárez, para ir a conectarse con la salida a Ciudad Cuauhtémoc.
Javier Garfio permanecía en prisión desde el pasado 27 de marzo, fecha en la que fue detenido y acusado de peculado por la venta de esos terrenos, los cuales fueron vendidos por 99 millones de pesos, cuando se señalaba que su precio real era de poco más de 470 millones de pesos.
Su permanencia en prisión algunos la señalaron de ser una venganza política y que el Juez de Control Alejandro Legarda Carreño se estaba comportando como un “juez de consigna”, pues incluso en varias ocaciones los empresarios que son lo que tienen en su poder los terrenos que compraron por cine millones de pesos, ofrecieron reintegrarlos al patrimonio estatal a cambio de que les regresaran la cantidad de dinero que ellos pagaron por esos terrenos, propuesta que negó el Gobierno del Estado.
Javier Garfio interpuso un par de procesos de amparo, los cuales le fueron negados y al llegar a la fecha de cierre de carpeta de investigaciones, él y sus abogados decidiera allanarse, declararse culpables para ir por el proceso abreviado, de tal forma que cuando se le dictó sentencia de tres años de prisión, pago de una multa y se estableció la fianza, ellos siguieron la ruta legal establecida y este domingo Javier Garfio salió del penal de San Guillermo.
Su liberación desato una serie de comentarios en redes sociales, en donde unos acusan de que la corrupción sigue viente, que su liberación es tras acuerdos en lo oscurito, que es una prueba más de que la cárcel no es para “los ricos” y que eso es lo mismo que va a pasar si algún día detienen a César Horacio Duarte Jáquez.
