Actualmente, al menos 23 países siguen llevando a cabo la pena de muerte. En América, el único que sigue aplicando la pena máxima es Estados Unidos.
El tema de la pena de muerte a nivel mundial, es un tema que sigue en el foco de las conversaciones públicas y políticas, ya que hasta 2017 -según datos de Amnistía Internacional– al menos 23 países de todo el mundo siguieron llevando a cabo ejecuciones. Sin embargo, hasta la misma fecha se ha logrado que 106 países -más de la mitad de los países del mundo- se unan a la iniciativa para abolir una de las penas máximas. Uno de esos casos fue el de México, quien en 2005 logró eliminar de forma definitiva la pena de muerte en la Constitución y en el Código de Justicia Militar.
La pena de muerte en México fue usada desde la época prehispánica, la cual dependiendo del delito cometido era la sentencia que se otorgaba. Por ejemplo, quienes eran acusados de adulterio o de alcoholismo, eran sentenciados a morir presionando su cabeza con dos piedras; a los homosexuales sorprendidos en el acto sexual, eran condenados a morir a golpes de garrote; mientras que, los ladrones atrapados robando, su sentencia era perder la mano.
Para la época colonial, la pena de muerte era una práctica que se llevaba a cabo por La Santa Inquisición. Pero en este particular caso, el acusado -principalmente por herejía- era sometido a diversas torturas antes de morir por las mismas. Fue hasta 1857, que se presentó el primer antecedente en México para la eliminación de la pena de muerte, la cual quedó plasmada en laConstitución de 1857, artículo 23 y sólo para delitos políticos, salteadores de caminos, incendiarios, parricidas y homicidas con alevosía o premeditación.
