El cineasta tapatío Guillermo del Toro, se lleva el Oscar a mejor director y al hacerlo le recordó a la industria del cine mundial que él es paisano de otros dos directores ganadores de la estatua dorada, Alejandro González Iñárritu, quien tiene dos una con “Birdman” y la otra con “The Revenant” y de Alfonso Cuarón que lo obtuvo con “Gravity”.
“Soy un inmigrante, como otros colegas…”, dijo el nacido en Guadalajara Jalisco un 9 de octubre de 1964, para luego señalar: “pero esta industria borra las líneas en la arena…”, dejando el mensaje de que el arte y la cultura unen lo que las fronteras dividen.
Sobre su película “La Forma del Agua”, detalló que él mismo al momento de presentar la idea de su película a los productores él sabía que su proyecto está basado en una idea demasiado loca.
Pero el mexicano logró contar un cuento para adultos que atrapa al espectador, con la magia de la música y nos cuenta una historia de amor imposible entre una bestia acuática y una muda.
Guillermo del Toro Gómez se convierte así en el tercer mexicano en ganar un Oscar como mejor director, pero ya cuenta con varios Arieles y un Premio Goya.
