Involucrar a la sociedad en el tema de prevención fue uno de los objetivos principales del Consejo de Prevención Social de Violencia y Delincuencia, que se conformó en la actual administración municipal como Órgano de Colaboración del Municipio y adquirió formalidad institucional.
Anteriormente llamado Grupo de Trabajo Multisectorial para la Asistencia Técnica (GTMAT), con miras a proporcionar las herramientas necesarias para alcanzar políticas públicas integrales y efectivas en prevención de violencia para el ámbito municipal. Su objetivo es coadyuvar mediante el intercambio de conocimientos, talentos y experiencias de sus integrantes, en la prevención y atención de la violencia y la delincuencia en el Municipio de Chihuahua.
De esta manera el Gobierno Municipal ha trabajado en dos años en el fortalecimiento de la prevención en zonas prioritarias del municipio que cuentan con mayor índice delictivo en materia de violencia familiar, brindando a la población herramientas y opciones para evitar incidentes, además de canalizar a jóvenes en conflicto a la DSPM para aplicar en programas que los ayuden a superar los problemas por medio de profesionales.
A principios de 2017 se aplicó por parte de un consultor externo contratado por USAID, “el Índice de Fortaleza Institucional (IFI), cuyo objetivo es medir y evaluar el estado de las capacidades en prevención de la violencia de los gobiernos municipales, sin importar sus características poblacionales, institucionales y/o económicas.
Así la administración 2016-2018 pretende que los resultados conlleven a la movilización de autoridades y ciudadanos por atender las áreas de oportunidad detectadas de modo que se generen comunidades más seguras.
Las cinco capacidades municipales que evalúa el Índice de Fortaleza Institucional son las siguientes:
1. Relación gobierno-sociedad cooperativa.
2. Herramientas operativas y administrativas para la prevención con base a evidencia.
3. Servicios y Servidores públicos especializados.
4. Marco normativo municipal.
5. Sistemas de información y comunicación.
El resultado de 2017 sirvió como línea base para la aplicación de la misma herramienta, ahora con diferente nombre (GOPI), el cual fue aplicado en el mismo periodo y que arrojó un incremento en las capacidades de un 20%. Dicho instrumento será aplicado año con año como parte del monitoreo y evaluación de la política transversal de prevención.
