Rogelio Ramírez de la O, secretario de Hacienda y Crédito Público (SHCP) viajó a Perú para asistir al gobierno de Pedro Castillo en el diseño de política social para el combate a la pobreza, informó el presidente Andrés Manuel López Obrador.
Al titular de Hacienda, se le suman funcionarios de la Secretaría de Relaciones Exteriores y de la Secretaría del Bienestar, precisó la Presidencia de la República.
En el pasado, el presidente López Obrador ha referido que la política exterior mexicana está basada en el respeto a la autodeterminación de los pueblos, por lo que ha rechazado emitir opiniones sobre situaciones políticas en Venezuela o Nicaragua.
“Tenemos que ayudar a los pueblos hermanos, porque esto no es sólo apoyar al presidente surgido de un movimiento popular, que es un dirigente que orgullosamente nace en la zona serrana, viene de las comunidades pobres”, explicó el presidente López Obrador.
“El Gobierno de Perú está pasando por una situación difícil”, sostuvo el mandatario federal.
Esta es una respuesta del gobierno mexicano a una solicitud hecha por la administración de Castillo, luego que el país sudamericano reciente los embates de la alta inflación mundial postcovid que provoca altos precios en materias primeras, escasez de inventario y un alza en la renta del flete marítimo.
De acuerdo con el Instituto Peruano de Economía, la inflación en aquel país ronda el 5.8%, la más alta de los últimos 12 años, lo que ha provocada una escalada en los precios del maíz, el pollo, el pan, el huevo y el azúcar.
Esta situación ha provocado el descontento de la población con el gobierno de Castillo, a tal grado que grupos opositores a su administración han comenzado a promover acciones para removerlo del cargo.
El martes pasado, el Congreso de Perú rechazó iniciar un proceso de destitución, promovido por diputados de derecha y extrema derecha, contra su presidente al considerarlo incapaz permanente y moralmente para conducir al país.
Sin embargo, esta moción no fue aceptada por el Legislativo peruano, donde la votación quedó en 76 votos en contra y 46 a favor del juicio político.
De acuerdo con encuestas de medios locales, el nivel de desaprobación del Pedro Castillo es cercana al 57% y la del Congreso peruano, dominado por mayoría opositora, del 75%.
