Al menos 82 muertos por incendio en hospital para enfermos de COVID-19 en Irak

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Un incendio en un hospital para COVID-19 en la capital de Irak dejó al menos 82 personas murieron y 110 resultaron heridas señalaron autoridades médicas del país árabe con más contagios.

El siniestro en el hospital Ibn Khatib en el área del Puente Diyala de la capital iraquí ocurrió después de que un accidente provocó la explosión de un tanque de oxígeno, afirmaron las fuentes.

¿Cómo fue el incendio en hospital para COVID-19 de Irak?

El jefe de la unidad de defensa civil iraquí sostuvo que el incendio estalló en el piso designado para la unidad de cuidados intensivos pulmonares y que 90 personas fueron rescatadas del hospital de 120.

El siniestro se produjo por cilindros de oxígeno “almacenados sin respetar las condiciones de seguridad”, explicaron fuentes médica. Una desgracia más en un país de 40 millones de habitantes cuyo sistema de salud nunca se ha recuperado de cuatro décadas de guerra.

En medio de la noche, cuando había decenas de familiares junto a “treinta pacientes en esta unidad de cuidados intensivos” reservada para los casos más graves en Bagdad, las llamas se propagaron a las plantas, informó una fuente médica.

“El hospital no tenía un sistema de protección contra incendios y los falsos techos permitieron que el fuego se propagara a productos altamente inflamables. La mayor parte de las víctimas murieron porque fueron desplazadas y privadas de ventiladores, y otras, asfixiadas por el humo”.Informó defensa civil.

Videos colgados en las redes sociales muestran a los bomberos intentando apagar las llamas mientras los enfermos y sus familiares tratan de salir del edificio, situado a las afueras de Bagdad.

El mayor general Kadhim Bohan agregó que el fuego se ha apagado.

¿Fue negligencia? Abren investigación

Este incendio, causado según diversas fuentes por negligencia -vinculada con frecuencia a la corrupción endémica- provocó un intenso debate en el país. “Dimisión del ministro de Salud” encabezaba las palabras clave en Twitter en Irak.

Es un “crimen“, denunció la Comisión gubernamental de derechos humanos.

“Contra pacientes extenuados por el covid-19 que pusieron sus vidas en manos del ministerio de Salud y que en vez de curarse murieron por las llamas”. 

La Comisión pide al primer ministro, Mustafa al Kazimi, que destituya al ministro de Salud, Hasan al Tamimi, y “lo lleve ante la justicia”.

Kazimi respondió anunciando “una investigación inmediata”, cuyos resultados quiere “en 24 horas”. También la han pedido el presidente de la República Barham Saleh y el jefe del parlamento Mohamed al Halbusi.

El primer ministro suspendió de sus funciones al jefe de Salud del sector oriental de Bagdad, al director del hospital y a los jefes de la seguridad y del mantenimiento técnico. Están siendo interrogados y nadie -dijo- podrá quedar en libertad “hasta que se juzgue a los culpables”. Decretó asimismo tres días de duelo nacional. 

Coronavirus en Irak

Irak, un país con escasez de medicamentos, médicos y hospitales desde hace décadas, superó el miércoles el millón de casos de COVID-19. Pero registra un número de muertos relativamente bajo, debido probablemente a que su población es una de las más jóvenes del mundo.

Según el ministerio de Salud, 1,025,288 iraquíes se han contagiado desde la aparición del nuevo coronavirus en el país en febrero de 2020, de los cuales 15,217 han muerto.

El ministerio de Salud afirma realizar a diario unos 40 mil tests, una cifra muy baja en un país con varias ciudades de más de dos millones de habitantes, donde la densidad de población es alta.

En vez de acudir a hospitales en estado ruinoso, los pacientes generalmente prefieren instalar un cilindro de oxígeno en su casa.

A inicios de marzo comenzó una tímida campaña de vacunación.

Irak ha recibido casi 650 mil dosis de diferentes vacunas, casi todas en forma de donación o a través del programa internacional Covax destinado a garantizar el acceso equitativo a las vacunas.

Casi 300 mil personas ya han recibido al menos una primera dosis, según las autoridades sanitarias, que intenta convencer a la población sobre la importancia de vacunarse y de usar cubrebocas.